El tango perdió a otra figura: a los 88 años murió el guitarrista Aníbal Arias, uno de los más grandes del género, quien se encontraba desde hacía tiempo internado en el Sanatorio Güemes. Su talento había acompañado al cuarteto de Aníbal Troilo y a nombres como Roberto Goyeneche, Edmundo Rivero, Azucena Maizani, Libertad Lamarque, Julio Sosa, Floreal Ruiz, Néstor Fabián, Violeta Rivas, Argentino Ledesma y Susana Rinaldi, entre otros. También tomó parte en la producción del proyecto “Café de los maestros” , impulsado por Gustavo Santaolalla y Gustavo Mozzi.
Había nacido un día del amigo (20 de julio)... de 1922, en Villa Devoto. Aprendió a tocar la guitarra a los cuatro años, influenciado por su padre, músico integrante del conjunto Acosta-Villafañe. A los 9 años conformó el grupo Los catamarqueñitos, con hermanos y primos. Ya en los ‘40 salió al ruedo profesional combinando conciertos de música clásica, folclórica y tango, como ladero del cantor Angel Reco.
Su incesante recorrido musical lo llevó a ser parte del cuarteto A Puro Tango y de un trío con Osvaldo Tarantino y Osvaldo Risso, pero además participó de los cuartetos de Enrique Alessio, Jorge Dragone, Armando Pontier, Héctor Stamponi, Luis Stazo, Eduardo Ferri, Celso Amato, Francisco Grillo, Osvaldo Piro y José Libertella.
Entre 1969 y 1975 se integró al cuarteto de Aníbal “Pichuco” Troilo en una experiencia que lo marcó estéticamente. Y más tarde fundó la Escuela de Música Popular de Avellaneda, donde se desempeñó como titular de las cátedras de Historia del Tango y Guitarra Tango. Otros de sus logros: fue titular de la Academia Nacional del Tango y de la Academia Argentina de Música.
Desde 1980, integraba la Orquesta del Tango de la Ciudad de Buenos Aires y sostenía un dúo con el bandoneonista Osvaldo “Marinero” Montes.
Coleccionista de guitarras, en el último tiempo sobresalió con su álbum solista reeditado en CD La guitarra romántica del tango .
Fuente: Clarin
